Este Agosto, en unos de esos ataques de espontaneidad con los que yo suelo arrollar , les suelto a los conmigo presentes... "no sé porque Virgen voy, creo que estoy perdiendo la noción del tiempo".
Y así era, os prometo que hubo un momento en el que yo había perdido las cuentas...
Porque este año , yo no había celebrado la Virgen de Dolores. Yo no había procesionado con ninguna Esperanza, ni la Macarena ni la de Triana. Yo no había vivido un camino con la Virgen del Rocío. Yo no había salido corriendo para Sanlúcar para despedir a la Virgen del Carmen mientras la embarcaban. Ni tampoco estaba pisando restos de Sal porque hubiera pasado la Virgen de la Caridad.
Este año mi almanaque, como todo lo demás, andaba extraño. No se estaban quedando en él esas estampas que me van marcando los tiempos, que me van situando y que me van guiando por el calendario.
Hasta esta mañana, que al despertarme me encuentro con este cartel. Un cartel anunciador que me dice que llega Octubre , que se acerca ese Tercer Domingo, que me marca esa fecha que tengo clavada con una chinchetita en mi alma.
Y ahí está Ella.... a la que desde pequeña , mientras la miro me invade la emoción y pierdo la razón. A la que le pido , le rezo, le ruego, y le suplico... "sácanos de ésta".
Sácanos de todo eso que tan a la perfección han reflejado en este fabuloso cartel. Que si he de ser sincera, como suelo ser, no es el cartel que me hubiera gustado ver. Pero si he de decir que es el que necesitaba mirar. Este fiel reflejo de la realidad plasmado por estos artistas con un exquisito gusto.
Este collage realizado por Juan Miguel Martín Mena , José María Gordillo y Daniel Salvador. Una mezcla de pintura, fotografía y retoque digital, que como bien anuncia nos llega al corazón. Que es donde este año celebraremos la Romería de Valme.
Felicidades a los autores de este cartel , habéis conseguido que me cale y que me embargue la emoción. A mí, a la que le encanta comentar carteles...
A ésta, a la que le habéis vuelto a datar este raro año. Y a la que mientras tiene delante vuestra obra, no puede evitar pedirle una vez más a nuestra Virgen de Valme...
"Valenos Señora",y cobíjanos con tu manto devolviéndonos a aquellos tiempos en los que nos podíamos besar y dar besos a tu medalla. Llévanos de nuevo a aquella época donde a todos todo nos iba mejor.
Te lo ruego, Virgencita.
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